
Desde que sigo la paleodieta (hace unos buenos años ya…) mis bebidas isotónicas se reducen a agua de coco natural (mi preferida, sin dudarlo un segundo) y estos brebajes que hoy os traigo.
Me encanta el pomelo, su sabor amargo y ácido a la vez con ese toque medio dulce al final le hacen muy característico. Si lo tomo solo, normalmente consumo nada más que media ración y es una de las frutas que mejor me sientan, ya que no las tolero muy bien (algunas más que otras).
En este caso, empleo un pomelo entero para la receta de mi bebida isotónica ya que se mezcla con 1 litro de agua. En vuestro caso podéis utilizar 2 pomelos o combinarlo incluso con una naranja o un limón. ¡Está riquísimo!
También dependiendo del esfuerzo físico que hayas realizado tendrás que tener en cuenta ciertos datos para prepararte una bebida isotónica casera acorde con tu actividad y así asegurarte un buen aporte de nutrientes de una forma rápida, evitando disminuir tus niveles de electrolitos que te salvarán del fallo muscular.
Si tu deporte es de larga duración, lo que generalmente se suele recomendar es una combinación de hidratos de carbono complejos junto con otros simples como fructosa o glucosa.
Si tu entrenamiento es básicamente con esfuerzos de poca duración, se recomienda que tu bebida lleve principalmente glucosa.
- Si tu bebida contiene más un 10% de azúcares, posiblemente te genere un retraso en el vaciamiento gástrico provocando diarrea y otras molestias gastrointestinales.
- Si tu bebida tiene su porcentaje de azúcares menor de 5% entonces contendrá poco valor energético.
No emplees más de 1 pomelo en esta receta. Puedes mezclarlo con zumo de limón, pero no de otras frutas.
Para qué sirven las bebidas isotónicas
- Su función principal es evitar la deshidratación.
- Nos proporcionan energía.
- Mantienen un equilibrio de líquidos en nuestro organismo.
- Reducen la degradación de las reservas de glucógeno.
- Ayudan a mantener estables los niveles de glucosa en sangre.
- Aceleran nuestra asimilación del agua.
Receta para preparar tu bebida isotónica casera
Es muy sencillo, solamente harán falta 4 elementos:
– 1 litro de agua
– zumo de pomelo
– 1 cucharadita de sal
– 1 cucharadita de bicarbonato sódico
Hay quien hierve el agua antes de combinarlo con los demás ingredientes, yo particularmente no lo hago porque ya la compro embotellada.
Ten en cuenta que no solamente queremos beneficiarnos de esta bebida reconstituyente, sino que también queremos que nos sepa bien. Usa siempre zumo de fruta natural no solamente por su sabor, sino porque evitarás aditivos innecesários.
Si quieres emplea el zumo de 2 pomelos o combínalo con otros cítricos.
Añade una cucharadita de sal marina sin refinar o sal del Himalaya, así estaremos cubriendo las necesidades de yodo. Agrega también otra de bicarbonato sódico. Aquí hay quien añade además 2 cucharadas de miel, pero con la fructosa de la fruta yo me doy por satisfecha.
Mezcla todo muy bien para que se disuelvan los ingredientes a la perfección y embotéllalo en un recipiente de cristal, nunca de plástico, ya que contiene bicarbonato. ¡Verás cómo suben las burbujas!
¡Bien fría está riquísima!
NOTA: Como mucho, puede durar 3 días en la nevera.





