
Hace ya unos días que circula una noticia referente a las nuevas medidas nutricionales que van a tomar en Suecia. Es algo que está rondando por internet y que ha llamado la atención de toda Europa y resto del mundo. Muchos blogs y webs ya se han hecho eco de ella, pero he querido investigar un poquito más al respecto.
Suecia se ha convertido en la primera nación occidental que desarrollará unas directrices dietéticas nacionales que rechazán el dogma popular de la dieta baja en grasa, en favor de consejos de nutrición totalmente diferentes, más ricos en grasa y más bajos en carbohidratos.
El interruptor que activó este asesoramiento dietético se inició con la publicación de un estudio de dos años de duración, por el Consejo Sueco, sobre la Evaluación de Tecnologías Sanitarias. El comité revisó 16.000 estudios publicados hasta el 31 de mayo de 2013.
El Doctor sueco Andreas Eenfeldt, el cual dirige el blog de salud más popular en Escandinavia (DietDoctor.com) publicó algunos de los aspectos más destacados de este estudio (en inglés).
Cuando estuve leyendo dicho blog, lo primero que me llamó la atención fue la cabecera de la página. Es una ilustración del médico que sujeta un copazo de lo que intuyo como vino tinto.
Su slogan es «Comida real para su salud». Teniendo en cuenta que la ingesta de una sola copa de vino al día (unos 250 mililitros) u otra bebida con poca graduación alcohólica, como la cerveza, triplica las posibilidades de contraer cáncer de faringe, esófago, mama y boca (informe publicado en la revista Annals of Oncology que fue elaborado a partir del análisis de los datos aportados por más de 200 investigaciones oncológicas) y que cada año se producen unas 34.000 muertes a causa de algún tipo de cáncer provocado por la ingesta de alcohol, esta imagen no me parece muy tranquilizadora…
Copitas de vino a parte, os traigo en español lo que explica Eenfeldt:
Los marcadores de salud mejorarán con una dieta baja en hidratos de carbono
«[…] Un mayor aumento en el colesterol HDL («colesterol bueno») sin tener efectos adversos en el colesterol LDL (el «colesterol malo») . Esto se aplica tanto a la ingesta moderada y baja en carbohidratos de menos de 40 por ciento de la ingesta total de energía, así como a una dieta baja en carbohidratos más estricta, donde la ingesta de hidratos de carbono es menos del 20 por ciento de la ingesta total de energía. Además, la dieta baja en carbohidratos estricta permite mejorar los niveles de glucosa en personas con obesidad y diabetes, y disminuyó marginalmente los niveles de triglicéridos.»
También enumera los «mantras» que nos han enseñado a aceptar como verdades:
«Lo importante es que haya un equilibrio entre las calorías que entran y las calorías que salen.»
«La gente está gorda porque no se mueven lo suficiente.»
«El desayuno es la comida más importante del día.»
Y añade: «Por supuesto, esto no es cierto. Este tipo de tonterías es la que tiene a la gente con problemas de peso, y además tienen el efecto de hacerles sentir mal consigo mismos al no conseguir objetivos.
Para muchas personas una mayor ingesta de grasa significa que se sentirán saciadas por más tiempo y, por ende, tienen menos necesidad de comer cada cinco minutos. En cambio, no te sentirás saciado después de beberte una Coca-Cola, o después de comerte un yogur de fruta bajo en grasa pero cargado de azúcares… Sin duda, el ejercicio físico es excelente en muchos sentidos, pero lo que realmente afecta en el peso es la dieta.»
El Dr. Eenfeldt también tradujo un artículo de un periódico local sueco donde se abarcan las conclusiones del comité :
La mantequilla, el aceite de oliva, la crema de leche y el tocino no son alimentos nocivos. Todo lo contrario. La grasa es lo mejor para aquellos que quieren perder peso. Y no hay ninguna conexión entre un alto consumo de grasa y las enfermedades cardiovasculares.
El lunes, el SBU, Consejo Sueco para la Evaluación de Tecnologías Sanitarias, soltó esta bomba dando un vuelco a las pautas dietéticas convencionales que se tienen en cuenta para personas obesas o diabéticas.
Durante mucho tiempo, el sistema de salud ha dado un consejo público orientado a evitar la grasa, grasa saturada en particular, y controlar las calorías.
Una dieta baja en carbohidratos (LCHF) en realidad es un «invento» de Suecia, y ha sido tachada como nociva y como una dieta de moda que carece de cualquier base científica.
En cambio, el sistema sanitario ha instado a los diabéticos a comer mucha fruta (= azúcar) y productos bajos en grasa con cantidades considerables de azúcar o edulcorantes artificiales, que incluso este último es un remedio peor, hasta peligroso para una persona que sea adicta al azúcar.
Este informe vuelve los conceptos actuales del revés y aboga por una dieta baja en carbohidratos y alta en grasas, como el arma más eficaz contra la obesidad.
El comité de expertos estaba compuesto por diez médicos y varios de ellos eran escépticos a las dietas bajas en carbohidratos en el inicio de la investigación.
Uno de los miembros del comité fue el profesor Fredrik Nyström, de Linköping, Suecia. Gran crítico de la dieta baja en grasa y un defensor de los beneficios de la grasa saturada, de fuentes tales como la mantequilla, la crema entera sin desnatar y el tocino.
Aquí tenéis algunas citas de Nyström traducidas por el Dr. Eenfeldt:
«He estado trabajando en esto por mucho tiempo. Es una buena sensación tener este informe científico, y ver como el escepticismo frente a las dietas bajas en carbohidratos entre mis colegas ha ido desaparecido en el transcurso de la obra. Cuando se alinean todos los estudios científicos recientes el resultado es indiscutible: el profundo temor de la grasa es completamente infundado. No se consigue la grasa de los alimentos grasos, como no se obtiene la aterosclerosis del calcio o te vuelves verde de ingerir verduras de color verde».
Nyström ha defendido durante mucho tiempo un consumo muy reducido de alimentos ricos en carbohidratos de alto contenido en azúcares y almidón, con el fin de lograr niveles saludables de insulina, lípidos en sangre y colesterol bueno. Esto significa acabar con el azúcar, patatas, pasta, arroz, harina de trigo y el pan, y en cambio aceptar más al aceite de oliva, las nueces, la mantequilla, la crema con toda su grasa, el aceite de pescado y los cortes de carne más grasos.» Fuente: http://www.dietdoctor.com/fat-trims-waistline
Lo asombroso de ello es que el año pasado saltó a la luz otra noticia, cuando investigadores suecos determinaron que debido a la introducción del régimen bajo en carbohidratos, esto dio lugar a un aumento en la ingesta de grasa saturada en el año 2004, con un aumento en los niveles de colesterol, tres años después.
El líder del estudio fue el profesor Ingegerd Johansson de la Universidad de Umea, y declaró que: «Mientras que las dietas bajas en carbohidratos y altas en grasas pueden ayudar a corto plazo a la pérdida de peso, los resultados de este estudio realizado en Suecia demuestran que la pérdida de peso a largo plazo no se mantiene y que esta dieta aumenta el colesterol en la sangre, lo que tiene un gran impacto en el riesgo de padecer una enfermedad cardiovascular«.
En 2004 se produjo una explosión entre la población sueca referente a este tipo de dietas, como la Atkins por ejemplo. Se centraron en dejar el azúcar y el almidón, mientras se aumentaba la ingesta de grasas, incluyendo las grasas saturadas.
Sus defensores, como el Dr. Annika Dahlqvist (que se acredita con el inicio de esta moda sueca) sostienen que ayuda a mantener un peso normal y azúcar en la sangre, mientras que libera a la gente para comer sus alimentos favoritos.
LCHF (LOW CARB HIGHT FAT)
Un sondeo del año 2012 sugiere que una cuarta parte de los suecos aprobaban una dieta LCHF (Low Carb Hight Fat). Alrededor del 5% ya la había tomado en serio, lo que lleva a una «revolución baja en carbohidratos». ¡Incluso hubo informes de las tiendas sobre la escasez de la mantequilla debido a la creciente demanda!.
El último estudio fue lanzado en 1986, después de su preocupación por la alta incidencia de enfermedades del corazón en el norte de Suecia. Los científicos analizaron datos sobre los alimentos y la ingesta de nutrientes, el peso corporal, la altura y los niveles de colesterol compilados a partir de más de 140.000 mediciones y cuestionarios entre 1986 y 2010.
Las opiniones de apoyo en los medios de comunicación sobre las dietas altas en grasas parecen haber tenido un impacto en el comportamiento de los consumidores suecos. Inicialmente, los cambios parecen beneficiosos y a partir de entonces, los niveles de colesterol perjudiciales aparecen en paralelo por motivo de estas tendencias en la selección de alimentos, mientras que la reducción de peso asegurada por dietas ricas en grasas no se observó en los años más recientes.
“Por el contrario, el IMC (índice de masa corporal) aumentó de forma continuada durante ese período de 25 años. Estos cambios en los factores de riesgo pueden tener efectos importantes sobre la prevención primaria y secundaria de enfermedades cardiovasculares”.
Así que acbe destacar el giro tan importante que están haciendo con los planteamientos nutricionales.
Me han recomendado dos libros a leer sobre el tema. Uno de Ann Fernholm, titulado Ett sotare blod (una sangre más azucarada) en el que con pruebas cientificas, analíticas de personas, etc. se demuestran los efectos en la salud de un siglo de azúcar; y el otro libro, escrito por el doctor Andreas Eenfeldt que he mencionado anteriormente, titulado Matrevolutionen (la revolución en la comida). Actualmente no sé si están traducidos, pero sería realmente interesante leerlos.
Este asesoramiento nutricional de una dieta alta en grasa y baja en carbohidratos ha existido desde la década de 1920, cuando la dieta cetogénica se desarrolló en el Hospital John Hopkins para curar la epilepsia en los niños que no respondían a los medicamentos. Con el advenimiento de las directrices dietéticas del USDA, a partir del informe McGovern en la década de 1970, la grasa fue condenada y el consejo sobre una dieta baja en grasa se empezó a promover a través del sistema sanitario. Como bien sabemos, las pautas nutricionales del USDA favorecen los cultivos fuertemente subvencionados de trigo, soja y maíz. Las fuerzas políticas son demasiado fuertes en los EE.UU. así que permitir que cualquier consejo dietético reduzca las ganancias corporativas con su consecuente producción de alimentos baratos será realmente complejo. Veremos qué postura toma Europa en general respecto a esta noticia.
Si no se te da mal el inglés, puedes ver fragmentos de la cobertura televisiva original del informe de 1977 en este video de YouTube que aparece en la película Fat Head:
[media url=»http://www.youtube.com/watch?v=xbFQc2kxm9c»]
Tras la entrevista que le realicé a Maelán Fontes, en la cual explica prácticamente la moda «low-carb» me gustaría mucho saber y conocer más sobre el tema, ya que están investigando con su equipo. Fontes afirma en mi entrevista literalmente que «algunos estudios han sido malinterpretados cuando hablan de reducir el consumo de cereales y automáticamente se ha puesto la etiqueta “low-carb” al patrón de alimentación donde los cereales son restringidos.»
Yo veo que es justamente lo que sucede cuando el Dr. sueco Nyström se refiere a «acabar con el azúcar, patatas, pasta, arroz, harina de trigo y el pan».
Particularmente pienso que los hidratos de carbono deben provenir de otra fuente, de una no tóxica.
Ha sido un bombazo de noticia por el impacto social que está teniendo, y más aún si se tiene en cuenta que Suecia propuso en el 2011 combatir la obesidad con impuestos sobre los alimentos que fuesen dulces y grasas.
Por mi parte, seguiré muy pendiente de las investigaciones de Staffan Lindenberg y Maelán Fontes.
Y para terminar, una gran frase la cual da mucho que pensar, que citó el Professor Philip James en una entrevista sobre sus investigaciones: «Si trabajas en alimentación tienes que enfrentarte a la política. ¿Por qué?, porque la primera industria del mundo es la comida, el sector agroalimentario, y si te enfrentas a ellos, irán a por ti.»
En Youtube he encontrado una conferencia de casi 1 hora del Dr. Andreas Eenfeldt (en inglés).
[media url=»http://www.youtube.com/watch?v=FSeSTq-N4U4#t=249″]
Fuentes:
Sweden touts low-carb diet as key to weight loss
Swedish Expert Committee: A Low-Carb Diet Most Effective for Weight Loss